Algunas madres tienen el defecto de pensar, de creer, que sus hijos son más listos que nadie. Si lo sabré yo, que tengo los chavales más listos del mundo. Pero a veces es falta de perspectiva.
Sus hermanos han enseñado a Patxi a jugar a "veo veo" y, como es muy listo, lo ha pillado enseguida y se ha aficionado. De camino a casa, sola con Ana, que se ha dormido mecida por el runrún del coche, y con Patxi, es una buena opción para entretenernos.
- Mamá, jugamos al veo veo.
- Vale. Empie...
- Veo veo.
- ¿Qué ves?
- Una cosita.
- ¿De qué color es?
- Marrón.
- Los árboles.
- No.
- Las hojas del suelo.
- No.
- Ese cartel.
- No.
- Tu caballo.
- ¡Sí! Ahora tú.
- Veo veo.
- ¿Qué ves?
- Una cosita de color...
- ¡Marrón!
- No. Azul.
- No. Marrón. Yo.
-Patxi, es mi turno, he dicho...
- Veo veo.
- Vale... ¿Qué ves?
- ¡Marrón!
- Mmmm. ¿Tu caballo?
- ¡Sí! Te toca.
- Veo veo.
- Ahora yo. Veo veo.
Y no sigo, por no aburrir. Pero, en resumen, nunca llegó mi turno y todo era marrón.
1 comentario:
Ja ja que gracioso Patxi jugando al veo veo.
Publicar un comentario